martes, 17 de marzo de 2009

Miraflores, 22 de diciembre de 1949

Jirón Arica, 517

Muy distinguido amigo:

Me es muy grato saludarlo y paso a pedirle un favor. Deseo que en los establecimientos América de Miraflores tenga usted la bondad de abrir un crédito por seiscientos soles, pagadero en la forma que usted desee, pero no a menos de treinta días término. Tengo que apelar a este recurso, porque me puedo anticipar la cobranza del número extraordinario de Año Nuevo que dará CASCABEL. Debo hacer varios regalos de Navidad y, naturalmente, apelo al más esforzado de nuestros industriales, en vez de caer en manos de un joyero judío. Le quedo muy agradecido por la atención que quiera usted prestarle a esta carta y le reitero las expresiones de mi amistad y mi consideración.

Al Señor Don

Pedro P. Díaz

Hotel Bolívar

Lima

Miraflores, 26 de noviembre de 1949

Recordado padre:

Leída la carta que le ha escrito usted a mi madre y en la que tiene usted la bondad de recordarnos. No tuve la suerte de ser su discípulo; pero lo conocí cuando me encontraba en edad de comprender todo lo que vale un sacerdote como usted. Le agradezco mucho sus recuerdos y lo saludo con filial afecto, deseando que Dios le dé vida larga y salud completa.

Al Reverendo Padre

Raymundo Zamarripa

Cádiz, España

Miraflores, 26 de noviembre de 1949

Mi querido e inolvidable señor don Chalo:

Esta carta debiera llevar fecha veinticuatro, día en que te recordamos todos. Te escribo para aconsejarte que te vengas. Este país será todo lo despreciable y todo lo de perro que tú quieras; pero es la Patria y en él está el hogar. Como tú sabes, yo soy un miserable e infame burgués. Creo que cuando uno ingresa en los grandes años, el hogar y la Patria son el supremo recurso y el mejor refugio. Una vejez sin plata en una gran ciudad, es peor que vivir en una choza del Altiplano. Si te animases a venirte, quizá me sea posible gestionarte tres pasajes. Aquí, en las calles, puedes darte todos los tropiezos que quieras y, como los cigarros están encareciendo, puedes cultivar tu viejo amor al pucho. Mi mujer, mis hijas y yo te mandamos muchos recuerdos y saludos, lo mismo que a Elba. Hazme el favor de decirle a Elba que me conteste esta carta, porque estoy seguro de que tú no lo harás en tu vida. Te abrazo con el cariño de toda la vida, tu hermano que siempre se ha sentido ligado a ti.

Al Señor Don

Gonzalo More

Nueva York

Miraflores, 13 de junio de 1949

Muy estimado y distinguido amigo:

Junto con mis saludos, le lleva esta carta el señor don Humberto Nieri, persona que goza de sólida reputación en el mundo agrario y en el campo de las letras y que, además, tiene el título —inapreciable a mi juicio— de contarse entre mis mejores amigos. Su causa es muy justa y él se la expondrá a usted. Le agradeceré mucho la acogida que le dé usted a mi amigo el señor Nieri. Le reitero el sentimiento de mi consideración y las expresiones de mi amistad.

Al Señor Doctor Don

Alberto Freundt Rosell

Presente

La señorita Carmen Reinoso More es Agente y Corresponsal del Semanario CASCABEL y del diario ADELANTE, órganos periodísticos cuya Dirección está a mi cargo. La señorita Reinoso More sale en gira internacional a nombre de ambas publicaciones y le otorgo esta credencial agradeciendo, de antemano, las facilidades y la cortesía que quieran prestarle todos aquellos con quienes tenga que entenderse.

La señorita Reinoso More pone su firma al pie de esta credencial, a fin de ser identificada. Lima, 10 de febrero de 1949

Miraflores, 26 de noviembre de 1948

Mi querido amigo:

Para completar la información que le di, ayer, acerca de la cuestión divorcio, quiero decirle lo siguiente: el proyecto de Clodomiro Chávez no fue rechazado por la Cámara. Encontraron un recurso bastante burdo, que fue pedirle a la Corte Suprema un informe sobre los juicios de divorcio en el Perú, Han pasado ocho años y el informe no llega. Pero lo importante es que el Parlamento no rechazó el proyecto de Chávez y que la Corte Suprema se ha reído del Parlamento. Esto es todo. En cuanto a lo otro, ya Eduardo tiene en su poder el recurso. Mil gracias por todo y reciba usted un afectuoso saludo de su invariable amigo.

Al Señor Doctor Don

Jorge Fernández Stoll

Lima

Miraflores, 17 de noviembre de 1948

Mí querido José Carlos:

Te lleva esta carta mi sobrina Hilda Reinoso More, taquígrafa de la Cámara de Diputados desde mil novecientos cuarenta o mil novecientos cuarenta y uno. Ella te contará cómo la zarandeó el Apra y su último percance con Pérez Cartier y Ponce Ratto. No voy personalmente llevando a Hilda porque muchas cosas me han tomado la mañana. Me habría gustado estrecharte la mano. Lo haré el sábado. Te agradezco todo lo que quieras hacer a favor de mi sobrina. Te saludo cordialmente y te reitero mi fraterna y vieja amistad.

Al señor Doctor Don

José Carlos Llosa G.P.,

Oficial Mayor del Congreso

Lima

Palacio Legislativo. Oficinas de la Presidencia

Miraflores, 18 de octubre de 1948

Mi querido amigo:

Hace dos meses que el doctor M.J. Chávez Lazo, radiólogo competentísimo y muy buen amigo, puso en mis manos el documento que va adjunto. El doctor Chávez Lazo quiere un préstamo sobre la instalación de radio, que ya está en Lima y que, hoy, dobla su precio original. Sabemos que el Banco ha hecho otros préstamos similares. No voy personalmente a verlo a usted porque se me han juntado mucho trabajo y mala salud.

Al doctor Chávez yo le he dicho que ya había hablado con usted, porque pensaba día a día, hacerlo. Le agradeceré mucho que, si las normas del Banco lo permiten, conceda usted el préstamo. El doctor Chávez es médico de casi toda mi familia. Mi hermano Ernesto irá a hablar con usted. Le reitero mi súplica a favor del doctor Chávez. Deseo que se conserve usted muy bien y, agradeciéndole la acogida que dé usted a esta carta, le saludo cordialmente repitiéndome su viejo servidor y amigo.

Al Señor Don Ricardo Madueño,

Gerente del Banco Industrial del Perú

Lima

Miraflores, 30 de setiembre de 1948

Muy estimado y distinguido amigo:

Mi más cordial y atento saludo, previamente; y, en seguida, voy a pedirle que me haga usted el servicio de ordenar que trasladen el teléfono de mi oficina —la número treinta y cuatro del edificio 1092 de la calle Belén —al número ciento ochenta y ocho de Pasaje Velarde. El teléfono es – cuatro – dos – cero – tres. Los operarios que vayan a sacar el teléfono de Belén pueden pedir la llave de mi oficina, al señor don Luis Samanamud, que ocupa la oficina número treinta y cinco, junto a la mía, naturalmente en el mismo edificio. Siempre me resulta más cómodo molestarlo a usted y no proceder por vía oficinesca. Una vez más, agradecido por este favor, me es muy grato reiterarle los sentimientos de mi consideración y de mi amistad.

Al Señor Don J.W. F. Dolmage Heath

Lima

Miraflores, 30 de setiembre de 1948

Mi muy estimado amigo:

Nuestro amigo Rodrigo Zárate dice que desearía tomar, para central política, las oficinas que CASCABEL ocupa en el número 1092 de la calle de Belén y que sabe que los propietarios me darían facilidades singularísimas para que yo deje esas oficinas. Creo, mi buen amigo, que la oportunidad es excelente para que yo me vaya con la música a otra parte y para expresarles a los propietarios del edificio donde aún están las oficinas de CASCABEL – y a usted, sobre todo – mi gratitud por la colaboración que nos han prestado al Semanario y a mí en la lucha contra los vándalos. No olvidaré nunca ese apoyo. Le agradeceré mucho que autorice usted la mudanza. ¿Cuándo conversamos un poco? Sírvase aceptar el testimonio de mi cordial amistad y de mi consideración.

Al Señor Doctor Don Luis Humberto Delgado.

Presente.

Miraflores, 11 de noviembre de 1947

Al Señor Doctor Don

Guillermo Garrido Lecca

Lima.Miraflores, José Gálvez 885

Teléfono: 56153

Teléfono en Lima: 34203

Apartado de correo: 1258

Señor Ministro y distinguido amigo:

A partir del miércoles 13 del presente mes y entre seis de la tarde y ocho de la noche, la Estación Goicochea transmitirá por sus dos ondas una revista del aire, revista filial de CASCABEL y que llevará su mismo nombre. Huelga decirle que CASCABEL en el aire será, como CASCABEL en la tinta, amigo y servidor del Perú y de su Gobierno. Le escribo a usted en vez de buscarle personalmente, porque quiero que el anuncio conste por escrito y que el tiempo me favorezca. Deseo que su salud mejore cada día y aprovecho de esta ocasión para reiterarle las expresiones de mi deferencia y de mi amistad.

Miraflores, 23 de abril de 1947

Señor Ministro y distinguido amigo:

Me apresuro a escribirle para rogarle que estudie usted, detenidamente, lo de convertir a “Jornada” en órgano defensor del Gobierno. Más vale ir solo que mal acompañado, mi General. “Jornada” es órgano desacreditadísimo. Nació con dinero de Benavides, ha logrado bastante dinero del Apra y también le han dado dinero los famosos millonarios. En poco más de dos años de vida ha cometido toda suerte de indignidades periodísticas. Me he abstenido de atacarlo solo por el respeto y el cariño que guardo hacia la memoria del señor Mariscal Benavides. Es creencia general que “Jornada” es una hoja aprista vergonzante. Es por lo menos, parte de la quinta columna. Con “Jornada” gobiernista, todo el mundo va a creer que el Gobierno sigue en manos del Apra y que, en consecuencia, el mensaje Presidencial es falso. Le adjunto, señor General, un proyecto para crear un verdadero periódico del Gobierno. De acuerdo con nuestras conversaciones, pronto le enviaré otros referentes a radio y cine. Puestos en manos de usted, estos documentos considero que serán conocidos por el señor Presidente de la República. Con mis atentos saludos le renuevo, Señor Ministro, las seguridades de mi leal amistad y elevada consideración.

Carta dirigida al Señor General Don Manuel Odría,

Ministro de Gobierno y Policía.

Miraflores, 7 de octubre de 1946

Mí estimado profesor y amigo:

Le escribo para enviarle mis saludos y evitar que se olvide usted de enviarme los prometidos dibujos y todos los datos que quiera. Es inútil decirle que nuestra campaña necesita un común denominador. Como nuestra campaña es de amigos del doctor Bustamante y adversarios del APRA, no creo que sea necesario que tomemos precauciones epistolares. Con todo, escríbame siempre certificado y a la casilla 1258. Ojalá que nuestras comunicaciones no se interrumpan. Quedo, siempre, muy cordialmente, como su servidor y amigo.

Al Señor Doctor Don Teodoro Núñez Ureta

Arequipa

Carta del Director de “Cascabel” Lima, 6 de diciembre de 1945

Señor Director de “El Comercio”

Señor:

Le quedaré muy agradecido si se digna usted publicar lo siguiente:

En espera de lo que resuelva el señor Presidente Constitucional de la República, “Cascabel” deja de salir. Si el atentado parlamentario llega a convertirse en ley, “Cascabel” no tiene motivos para seguir. Si por fortuna ese atentado no llega a ley, “Cascabel” reaparecerá. Entre tanto marcamos el paso.

Le anticipo, señor Director, mi reconocimiento por la publicidad que les dé usted a las líneas anteriores.

Muy atentamente.

“El Comercio”, edición de la tarde del día 7 de diciembre de 1945.

Lima, 6 de diciembre de 1945

Señor Director de

“El Comercio”

Señor:

Le quedaré muy agradecido si se digna usted publicar lo siguiente:

En respuesta de lo que resuelva el Señor Presidente Constitucional de la República, “Cascabel” deja de salir. Si el atentado parlamentario llega a convertirse en ley, “Cascabel” no tiene motivo para seguir. Si, por fortuna, ese atentado no llega a ley, “Cascabel” reaparecerá. Entretanto, marcamos el paso.

Le anticipo, Señor Director, mi reconocimiento por la publicidad que les dé usted a las líneas anteriores.

Muy atentamente.

Carlos More y Barrionuevo fue hijo legítimo del señor Federico More y de la Sra. Julia Barrionuevo de More. Nació en Arequipa, el 5 de noviembre de 1904. Hizo sus estudios en el Colegio de los Jesuitas de Arequipa y en el de la Inmaculada de Lima. Cursó dos años en la Escuela de Agricultura, carrera que abandonó para dedicarse a la pintura y el dibujo.

El año 24 emprendió viaje a Europa en compañía de su hermano Ernesto, habiendo permanecido en el Viejo Mundo hasta el año 1929. Se perfeccionó en academias de Berlín y París. Al poco tiempo de su regreso al Perú hizo una exposición de sus cuadros, en el Hotel Bolívar, exposición que la crítica recibió muy favorablemente.

Colaboró en varias revistas de Lima, especialmente en Cascabel.

Desde el año 1941 inició en el sur del Perú estudios sobre los procedimientos textiles de los indígenas, con el objeto de establecer talleres cooperativos que tuvieran sentido social y artístico. Sus estudios lo llevaron a la conclusión de que el mejor lugar para la ubicación de la primera Colonia Indígena de Trabajo Colectivo era Vilquechico, en la provincia de Huancané, en vista de estar poblado este distrito por gentes dedicadas a los trabajos textiles. La proximidad de este lugar al lago Titicaca, el hecho de encontrarse a la vera del camino carretero, y de tener un manantial de agua carbonatada, excelente para lavar la lana, fueron factores que lo movieron a proponer este punto como el más conveniente para la instalación de esa primera Colonia.

Carlos More, en compañía de don Liborio Rubio, técnico textil experimentado, diseñó e hizo trabajar, por cuenta del Gobierno, 25 telares, en los que se introdujeron ciertas modificaciones al tipo de telar peruano primitivo, aunque tratando siempre de conservarle su carácter. 23 de estos telares fueron remitidos a Vilquechico, algunos de los cuales han sido armados y se encuentran en pleno proceso de producción.

Carlos More inició los trabajos de ampliación de locales en que había de funcionar temporalmente el taller, hasta que se pudiese construir por el Gobierno el local adecuado, cuyo proyecto está en estudio en el Ministerio de Fomento.

En el momento de su muerte (26 de enero de 1944) se estaba construyendo la base para colocar el motor con el que había de moverse un torno para hilar. Como el hilado a mano es sumamente moroso y deficiente, era absolutamente indispensable apelar a otro sistema, que es el que debe comenzar a funcionar en estos días, y con el que se procurará abastecer las necesidades del taller.

El establecimiento de esta Colonia, que mereció el apoyo del Presidente Prado, tiene gran trascendencia social y nacional, porque gracias a ella se permitirá la absorción industrial de un numeroso núcleo indígena, el que, una vez organizado, quedará como propietario de aquel. Por otra parte, se tendía a mejorar la producción sumamente rudimentaria del indígena, de suerte que se llegase a producir telas con alpaca, llama y, si posible, vicuña, que no admitiesen competencia en el extranjero, por el hecho de ser el Perú un país privilegiado y casi monopolizador de estas especies de auquénidos. Asimismo, si se tiene en cuenta la tradición textil de los peruanos y la inclinación natural de los indios a tejer obras de verdadero mérito, es comprensible que no era ilusorio albergar esa esperanza.

La Dirección de Industrias se propone realizar en breve una exposición de los tejidos logrados en Vilquechico, algunos de los cuales han llegado ya a poder de esa Dirección.

Carlos More trabajó con entusiasmo indeclinable en esta obra, poniendo en ella su espíritu artístico y su convicción social. Sin duda alguna, Carlos More había encontrado su verdadera aplicación al tratar de interpretar en las telas el verdadero sentido de nuestras tradiciones textiles, la orientación vital del espíritu decorativo de nuestros indígenas y las posibilidades que ofrecen las diversas hebras que son exclusividad del Perú.

Miraflores, 1 de diciembre de 1945

Muy estimado y distinguido amigo:

Le mando, en copias simples, la papelería referente a la casa y el plano de ella, además de algunas indicaciones sobre lo que está ya construido. El asunto es este: se necesitan no menos de treinta y cinco mil soles; de ellos algo como veinte mil para redimir la hipoteca existente y transferirla al Banco. El resto para terminar la casa, lo que tomaría un plazo no mayor de dos meses, y que empezará a rendir. Todo se haría bajo la supervigilancia del Banco. Me dirijo a usted particularmente, valido de nuestra buena amistad, para que usted me diga si vale la pena formalizar el pedido ante el Banco y enviar los papeles en copias certificadas. Espero su respuesta, le saludo cordialmente, le agradezco la atención que le merezca esta carta y le reitero las expresiones de nuestra vieja y firme amistad.

Al Señor Don

Salvador Carrillo,

Subgerente General del

Banco Central Hipotecario del Perú Lima.

Lima, 15 de setiembre de 1942

Mi querido Ignacio:

El sábado diecinueve de este mes —es decir, dentro de cuatro días— se ve mi asunto con nuestro amigo el Barbón, o, si prefieres, nuestro asunto con mi amigo el Barbón. La defensa está muy bien hecha y yo estoy afiladísimo. Pero es imprescindible que te dejes oír. La sala la forman Antonio Mata, que vive en Avenida Arequipa y cuyo teléfono es el 36177; Raúl Noriega, que vive en Mayta Cápac y cuyo teléfono es el 37542, y Mariano Ibérico, que vive en Miraflores, calle Fanning, y cuyo teléfono es el 57529. Puntualizo tanto a fin de que tu secretaria no pierda ni un minuto [ilegible] derroten.

Mil gracias por las influencias que ejercites. Recibe mis renovadas felicitaciones por el constante acierto de tu gestión, mis votos por tu salud y las seguridades del viejo y fraterno afecto que nos une.

Lima, 28 de mayo de 1942

Muy estimado y distinguido amigo, señor doctor Bianchini:

Voy a agradecerle que, si ello es posible, me haga los siguientes favores. Necesito que la Electroperuana me conceda un crédito de aproximadamente seiscientos cincuenta soles, para pagarlos en cuotas semanales. Para la casa de mi madre, Julia de More, en Lima, en el número 188 del Pasaje Velarde, compré una cocina eléctrica en quinientos cincuenta soles. Debo doscientos diez. Usted, en compras que hice antes, siempre me concedió un descuento del veinticinco por ciento. ¿Sería imposible concedérmelo en la compra de esa cocina? Al fin, doctor, quiero que ordene usted que la Sección Ventas de las EE. EE. A.A me entregue una cocina de las que valen mil soles. Presumo que tendré el descuento. En julio, empiezo a cobrar de nuevo los Doscientos cincuenta soles mensuales de los avisos. Los dedicaría a pagar los pedidos que ahora le hago. Apelo a tantos recursos porque me urge terminar la casa de Chosica. Mil gracias por todo, doctor. Me olvidaba decirle que el crédito en la Electroperuana lo quiero en materiales. Espero su respuesta y le reitero las seguridades de mi amistad y consideración.

Al Señor Doctor Don Gino Bianchini.

Lima, 11 de diciembre de 1941

Señor Don

Alejandro Arispe

Arequipa

Mi querido amigo y pariente:

Le escribo para saludarlo y pedirle un favor: necesito que el martes de cada semana estén en mi poder los periódicos arequipeños del día lunes. Si hay, en esa, alguna revista hípica, también me gustaría que viniese con los diarios. Estoy seguro de que usted puede servirme en esto, ya sea directamente —lo que sería el ideal— o ya por medio de persona garantizada por usted. Le agradeceré que me indique el costo de estos servicios. Quizá fuese mejor que CASCABEL tuviera allá un corresponsal especial que le hiciera todas las semanas un envío en el aéreo del martes, acerca de todos los aspectos de la vida arequipeña. CASCABEL podría pagarle quince soles a la semana y un sol por cada fotografía publicada. Le aseguro a usted mi querido Alejandro, que todo esto me interesa bastante y me haría un gran servicio ayudándome a realizar el plan que aquí le esbozo.

Le deseo todo bienestar y le saludo con cordial afecto, diciéndome su servidor, pariente y amigo.

Miraflores, 15 de setiembre de 1941

Mi querido Fernando:

Como ya escogió usted los doscientos metros de terreno y conoce usted su forma, cumplo con enviarle, para que haga usted el plano, la relación de lo que necesito: un dormitorio matrimonial; un dormitorio para las chicas; comedor; billar; una salita de recibo; otra salita de recibo; bar; salita de música; escritorio; un cuarto para empleados; otro cuarto para empleados; un baño; un medio baño; un baño para empleados; un cuarto de costura; un cuarto de vestir con sus roperos; cocina; antecocina; despensa; lavadero; sitio para secar ropa. No es necesario terreno alguno para animales. Hay que perder sólo el terreno que exigen los jardines reglamentarios y el que requieran la ventilación y la luz. Es inútil decirle que debe haber garaje. Estoy obligado a usar, hasta donde sea posible, materiales de la Parva Domus y le ruego que tenga presente esta circunstancia. Fuera de la Parva Domus adquirirá solamente aquella que la Parva Domus no tenga. Respecto a honorarios, pago de planillas, elección de albañil, etcétera, conversaremos cuando usted quiera.

Hasta a cada rato. Un cordial y afectuoso apretón de manos. Al Señor Ingeniero Don

Fernando Ugarte

Lima

Miraflores, 5 de setiembre de 1941

Mi muy estimado y distinguido amigo, señor doctor Bianchini:

Le escribo para reiterarle mis deseos de que su viaje sea feliz y que, en él, logre usted todos sus objetivos. Me proponía buscarlo uno de los días de la semana que viene para decirle que voy a sacar un diario, quizá de la mañana, casi seguramente de mediodía. Me hace empresa la Empresa “Editora Peruana S.A.” y asumirá la Gerencia y la administración el señor don Ramón Venegas. Transferiré al diario mis posibilidades económicas de hoy. Queremos hacer una organización periodística en grande y que, por su tamaño, esté en condiciones de ser respetada. Así debe ser en un país donde sólo el tamaño es respetable. Pero un diario es un diario. Son trescientas sesenta páginas al mes, en lugar de cuarenta y ocho. Lo que quiero decirle es que estudie la forma de ampliar la ayuda que hoy me presta. Ampliarla en cualquier medida. Los verdaderos dueños de la Empresa Editora Peruana son Ignacio y Gerardo y, por supuesto, simpatizan con el asunto, aunque sólo sea porque le dará a la imprenta mucho impulso. Como usted ve, se trata de algo que vale la pena. Otra cosa: le ruego que, en New York, me conecte con una agencia de servicios periodísticos en general y que haga el envío por vía aérea. Nada de cables ni de teléfonos. Es preferible que todo venga en español, pero, si en la calidad se gana, no importa que venga en inglés. Seguramente, el inglés de los yanquis es tan malo como el español de sus traductores. Quizá es preferible traducir aquí. Lo que quiero es que la agencia tenga la mayor cantidad posible de servidos. Que venda flanes o cartones para estereotipias. O bien originales fotográficos para fotograbarlos. Para mí esto es muy importante y estoy seguro de que usted me ayudará a resolverlo en forma excepcionalmente buena. Perdone la molestia que pueda ocasionarle mi pedido y acepte mi agradecimiento anticipado. Le reitero mis votos por su salud y por la felicidad de su vieja y quedo esperando sus órdenes siempre como su amigo y servidor.

Al Señor Doctor Don Gino Bianchini

Lima

Miraflores, 5 de setiembre de 1941

Mi estimado y distinguido amigo:

En primer término, un cordialísimo saludo, mis votos por su bienestar y mi agradecimiento por la gentileza con que atendió usted mi último pedido, gentileza que, por lo demás, le es habitual. A la altura del kilómetro treinta y nueve de la pista de Lima a Chosica y en el lado izquierdo, como quien va a Chosica, existe un pasaje llamado “Los Plátanos” en el cual tienen casa la familia Bryce y la familia Debernardi. Entiendo que en ambas hay teléfono. Le doy tantos datos para que el pasaje esté bien localizado. En ese pasaje ha construido su casa la señorita Carmen Giradles y quiere teléfono. La señorita Giradles no irá a habitar esta casa antes de cuarenta días. Por eso me anticipo a pedirle a usted que tenga la bondad de ordenar, si es posible, esa instalación. Usted me dirá cuáles son los trámites que debe llenar ante las oficinas de la Compañía la señorita Giradles.

Vivamente reconocido por sus favores, aprovecho esta oportunidad para decirle que soy, siempre, su invariable amigo y servidor.

Al Señor Don

J.W.F. Dolmage Heath

Lima

lunes, 16 de marzo de 2009

Al Señor Doctor Don

Gino Bianchini:

Mi muy estimado y distinguido amigo, señor doctor Bianchini:

Le escribo para saludarlo tan atenta y cordialmente como siempre, deseando que sus preocupaciones hayan pasado y para decirle estas tres cosas:

Primera: que le agradezco muy de veras el nuevo servicio que le debo por el trabajo realizado por el ingeniero señor Silva, en Chosica. De todos los favores que le debo a usted, este es uno de los principales. Le renuevo, pues, mi gratitud y la de los míos.

Segunda: he recibido un aviso telefónico, bastante descortés y, según me dicen, aunque no lo creo, procedente de la R.L.I., para pedir que se suspenda el envío de los cuatrocientos números semanales de CASCABEL. Si no estuvieran pagados por adelantado, créame usted que la orden habría sido muy bien recibida. Por desgracia, se me quiere colocar a la fuerza en situación de incumplimiento. Además, encuentro un poco pueril el resentimiento y no me parece porque sé ser amigo de que la hora sea buena para enfadarse. Usted doctor, conoce de antiguo mi clara y definida posición democrática antifascista. Esto nunca ha sido un misterio. En mi condición de peruano puedo ser un ardiente italianófilo, como lo soy, y un resuelto fascistófogo, como lo soy también. Quizás sea lógico que a los italianos se les obligue a ser fascistas. Pero los no italianos podemos pensar de otro modo y siempre he creído que Italia está por encima de cualquier sistema de gobierno. Sé que usted me comprende muy bien. Lo que le ruego es que, si ello es posible, consiga usted que me comprendan también muchos que están obligados a comprender.

Tercera: he alquilado la radio Miraflores y voy a ponerle onda corta y a instalarle estudios. El negocio con Goicochea resultó irrealizable por la pésima calidad moral y mercantil del ingeniero Goicochea y del señor Roy Mercado. Hoy me posesiono de Radio Miraflores, OAX 4L. Naturalmente, quedo con el agrado y la decisión de siempre, a las órdenes de usted en mi nueva actividad.

Le renuevo las expresiones de mi amistad y mi consideración y quedo esperando sus órdenes.

Miraflores, 7 de agosto de 1941

Mi muy estimado y distinguido amigo, señor doctor Bianchini:

Estoy en momentos de terminar mi cabaña de Chosica y ha llegado la hora de molestarlo una vez más, valido de una antigua promesa de usted, generosa como suya. Se trata de que le indique usted al ingeniero señor Silva que proceda a instalar la bomba que usted me ofreció. El maestro de obras —Juan Celada— que está constantemente en la construcción, se pondrá a sus órdenes y le indicará lo que hay que hacer, en el sentido de ubicaciones. Mi presencia ahí es inútil, porque mi ignorancia en la materia es enciclopédica. Con lo que yo no sé en estos asuntos podrían hacerse muchos tomos. Además, no tengo tiempo, porque en estudiar caras y desentrañar palabras pierdo el que tengo. O lo gano. Mediante usted, pues, doctor me pongo en manos del ingeniero señor Silva. Otra cosa. Le pido que ordene usted que instalen los elementos para dotar a la casa de fuerza y luz. En el pasaje donde he construido hay hasta cuatro casas, ya habitadas, de modo que la electricidad ya llegó ahí. Es el Pasaje Los Plátanos, en el lado izquierdo de la pista, como quien va a Chosica, y a la altura del kilómetro 39. Si a usted le parece, el valor de las instalaciones podría cargarse a mi cuenta de setiembre. Tengo dos hijas que necesitan una larga convalecencia en Chosica, para eliminar los restos de una bronconeumonía. Me apura pues establecerme en la famosa Villa del Sol. Muy pronto iré personalmente a saludarlo y a expresarle los agradecimientos que, en esta carta, le anticipo. Deseo que se conserve usted bien, le saludo cordial y deferentemente y quedo siempre a sus órdenes como su servidor y amigo.

Al señor Doctor Don

Gino Bianchini

Lima

Miraflores, 22 de mayo de 1941

Señora Doña

Rosa Mavila de More

Ayacucho

Mi querida Rosa:

He recibido tu carta y me apresuro a contestarla para decirte que siento mucho que no estemos de acuerdo respecto a la actitud de Humberto: yo la encuentro muy razonable y justa, porque en realidad no es fácil remover a dos subprefectos que están en sus cargos en las condiciones a que se refiere Humberto respecto a las dos subprefecturas de que hablamos; en cuanto a la solución hipotecaria que Humberto te propone, la encuentro muy inteligente si es viable: te confieso que en esto de hipotecas mis alcances son muy cortos; pero si en algo puedo ayudar, espero tus órdenes. En cuanto a subprefecturas en ese departamento, me parece que sería posible trabajar la de Parinacochas, provincia que no tiene Diputado y sobre la cual, por consiguiente, no hay compromisos. Sin prometerte nada en firme, te prometo que iniciaré trabajos para que César vaya a esa subprefectura. En cuanto al ingeniero departamental —cuyo apellido no me dices— y al diputado Salcedo, no los conozco. Apúrate en contestarme diciéndome si tienes algo nuevo entre manos y para César. Si te es posible dile a Juanito More que no apresure las cosas porque me parece que será posible resolverlo todo con satisfacción para ambas partes. Carmen me dice que va a escribirte y te anticipa sus abrazos. Mis saludos para todos los tuyos y para ti mis mejores votos y las expresiones de mi afecto.

Miraflores, 24 de marzo de 1941

Mi muy distinguido y estimado amigo:

El auxiliar Baldomero García López, que ha estado por algún tiempo a mi servicio y de cuya preparación y buena conducta puedo dar fe, lo mismo que de su afán por el estudio, ha dado exámenes para ascender y me pide que lo recomiende a usted, para que usted con su equidad y espíritu de justicia lo ponga a cubierto de los favoritismos, inevitables en estos casos y que podrían colocarlo en un lugar inferior al que legítimamente pueda corresponderle y quitarle, así, un ascenso merecido. Hago pues la recomendación con mucho gusto y crea usted que en los mejores términos rogándole a usted que me haga el favor de tenerla en cuenta. Le quedo muy agradecido.

Con mis mejores deseos por su salud y bienestar, le reitero el testimonio de mi consideración y quedo, invariablemente, como su amigo y servidor.

Al Señor Coronel Don

Manuel Pío Portugal

Lima

Miraflores, 7 de marzo de 1941

Señor Doctor Don

Gino Bianchini. Lima

Mi muy estimado y distinguido amigo señor doctor Bianchini:

No quise interrumpir con mis expresiones de pesar sus, ahora más que nunca, recargadísimas labores; como amigo suyo y de las Empresas y como habitante de La ciudad que estimo en todo lo que valen los grandes servicios públicos, estoy consternado ante el percance sufrido por la ciudad y por las Empresas ya que todos padecemos por igual. En cuanto a mi posición periodística, considero que lo más delicado e inteligente en circunstancias tan azarosas es no abrir la boca.

Siempre muy devotamente suyo como su amigo y servidor que le desea bienestar hasta donde esto sea posible en las circunstancias actuales.

Al Señor Doctor Don Gino Bianchini.

Lima.

Lima, marzo 1 de 1941

Señor Don

Víctor Echegaray

Presente

El encarecimiento de todos los trabajos tipográficos obliga a CASCABEL a reducir su personal y por este motivo es inevitable prescindir de las valiosas cooperaciones de usted, aunque manteniendo la esperanza de que pronto será posible que se reinicien.

Lo saludamos atentamente.

Miraflores, 13 de enero de 1941

Mi muy estimado y distinguido amigo señor doctor Bianchini:

En primer lugar, mi vivo y hondo agradecimiento por sus cordiales y amables palabras de condolencia, tan sinceramente enviadas y muy sinceramente recibidas, ya que, entre mis cuatro hermanos, el muerto fue mi mejor amigo. Otra vez, doctor, muchas gracias.

Finalmente le expreso mi gratitud por sus bondades en cuanto se refiere a los trabajos del señor ingeniero Silva. Mañana o pasado lo llamaré.

[Ilegible]... pedirle un servicio y a ello me obliga el alza, ya catastrófica, de los materiales de imprenta. Ha llegado a tal punto, que es imposible incrementar el tiraje, a pesar de que yo estaría obligado a ello, pues tengo fuerte demanda. Pero en cada ejemplar perdería un poco más de cuatro centavos. Y no hay publicidad. Pero la cosa no tiene remedio y no hay más solución que hacerle frente. Es el caso que necesito dos mil soles entre hoy y mañana. Y he pensado que usted puede hacerme el servicio de adelantármelos. Me permito proponerle la siguiente operación. Entre el primero de febrero y el 29 de marzo de este año, debo recibir, por mano de usted, las siguientes sumas:

Cuatro sábados de febrero 1600

Cinco sábados de marzo 2000

Por ejemplares de febrero 160

Por ejemplares de marzo 200

Por el aviso de febrero 160

Por el aviso de marzo 160

Son cuatro mil doscientos ochenta soles oro. Me haría usted un señaladísimo servicio si, de tal suma, me pagara dos mil en diez semanas de doscientos soles cada una, a partir del sábado 25 del mes en curso y me anticipase, ahora, dos mil doscientos ochenta. De ese modo, resuelvo la crisis del momento y hago frente a la que viene, a base de los doscientos soles semanales del saldo. Tengo, doctor, la firme esperanza de que le será posible prestarme este nuevo servicio. En cuanto usted indique, le remitiré las facturas.

Por ello, le anticipo mi agradecimiento.

Me complace mucho que los últimos números le hayan gustado particularmente. Ojalá sea posible mantener el tono.

Con mis mejores votos por su salud, le estrecho la mano y quedo, siempre, reiterándole mi deferencia, como su servidor y amigo.

Al Señor Doctor

Don Gino Bianchini

Lima

Mi querido Ignacio: te lleva mi carta nuestra buena amiga Gilda o sea la señora Raquel Delgado de Castro. Ella, que tiene todos mis poderes, te explicará el asunto de que se trata. Te anticiparé sin embargo, que están de por medio los documentos parlamentarios: me parece injusto que todos los periódicos de Lima tengan una mina en esos documentos y que CASCABEL esté fuera de ese concurso.

Pongo en tus manos el asunto seguro de que quedará muy bien resuelto. Te agradezco de antemano lo que hagas en esta materia y con las expresiones de mi consideración y mi amistad te abrazo diciéndome siempre tu invariable servidor y viejo camarada.

Lima, 10 de enero de 1941

Al Señor Doctor Don

Ignacio A. Brandariz,

Primer Vicepresidente del Senado.

Lima

Miraflores, 2 de diciembre de 1940

Señor

Jefe General de Radio:

En la fecha he comprado las horas de Radio Miraflores OAX4L y he decidido establecer para la transmisión en onda larga, el siguiente horario: de nueve de la mañana a tres de la tarde y de cinco de la tarde a doce de la noche. Espero que este cambio merecerá la aprobación de usted. Lo saludo muy atentamente y quedo a sus órdenes.

Federico More.

Miraflores, 25 de noviembre de 1940

Mi querido Enrique:

He estado siempre con ganas de escribirte; pero entre el periódico, el amor, la política, la familia, los achaques, los negocios... me ha faltado siempre tiempo. Como tu carta última tiene carácter de urgencia, procedo a contestarte en el momento de recibirla. Esta misma tarde veré a las personas que me indicas y haré todas las averiguaciones del caso acerca de los ascensos y de los cuadros de mérito. Espero que, dentro de dos o tres días, podré escribirte nuevamente con datos, si no completos, suficientes, y trataré de tenerte al día acerca de todo el proceso. Ya conozco todo el recorrido de nuestro amigo: hubo un momento en que se temió que su gira fuese continental. Los amigos bien. El sábado último tuvimos un almuerzo en casa de Javier; nos sentamos a la mesa a las seis de la tarde. No tengo que contarte el resto. Supongo que el almuerzo ha terminado al amanecer del lunes, o sea hoy.

No tengo nada especial que contarte. Deseo que estés muy bien, con mucha salud y con mucho dinero; en cuanto al amor, conserva tus recuerdos. Te estrecha la mano fraternal tu viejo compañero y amigo.

Al señor Teniente Coronel Don

Enrique Barreda,

Jefe de Estado Mayor de la IV Región. Cusco

Miraflores, José Gálvez 885

Teléfono: 56153. Teléfono en Lima: 34203 Apartado de correo: 1258

Mi muy estimado y distinguido amigo, señor doctor Bianchini:

En primer lugar, que se encuentre usted muy bien y sin enfermos. Respecto al negocio, que parece terminado, le presento un plan cuyo monto es, en muy poco, superior al de usted. Su totalización es la siguiente:

Por venta de cuatrocientos ejemplares semanales, durante diez semanas, entre el 23 de noviembre de 1940 y el 25 de enero 1941

S/. 400.00

Asignación de la EE.EE.AA. a Radio CASCABEL, que transmite por las ondas de Radio Goicochea, asignación de noviembre y diciembre de 1940, a doscientos soles oro el mes

S/. 400.00

Avisas de las EE.EE.AA. en el periódico impreso CASCABEL a ciento sesenta soles mensuales: adelanto de noviembre y diciembre de 1940 y enero de 1944

S/. 480.00

Adelanto personal del señor doctor Bianchini, de ocho semanas de subsidio, que terminan el 25 de enero de 1941

S/. 3,200.00

Suma S/. 4,800.00

De este modo, todo quedaría arreglado hasta el 31 de enero de 1941. Todo menos la cuestión radio, ya que, con el negocio que emprendo, cambiará la faz de Goicochea y no habrá CASCABEL en el aire sino Radio CASCABEL. Hasta ahora, todo se presenta en inmejorables condiciones. En cuanto al subsidio semanal de cuatrocientos soles oro, no sé cómo extenderle recibo. Que esta carta lo sea. De los demás renglones, van las facturas canceladas. Espero que todo esto merezca su aprobación y quedo esperando su respuesta. Con la cordial deferencia de siempre, soy su servidor y amigo.

Miraflores, 18 de noviembre de 1940

Al señor Doctor Don

Gino Bianchini

Lima

Miraflores, calle José Gálvez 885.

Teléfono: 56153 Teléfono en Lima: 34203. Apartado correo: 1258.